8 de mayo de 2011

UN ACTO DE JUSTICIA CON EL ARTE. Por AVELINA LÉSPER


Un acto de justicia, ante una forma de robo que llaman arte
Por Avelina Lésper 
avelinalesper.blogspot.com

 
Desde que el robo de la obra de otro autor es recurso estético y se llama apropiación, cita, referencia, arte transformativo etc., las obras de arte son robadas y explotadas por oportunistas. Hasta que las demandas se hicieron presentes. Esto es común en las letras, donde han sido acusados de plagio desde Camilo José Cela hasta Brice Echenique. 

Con las artes visuales no es así, desde que Duchamp tomó la Mona Lisa de Leonardo y le pintó bigotes, en un acto de vandalismo más que artístico, esto se convirtió en un recurso súper explotado. Pero los artistas afectados comienzan a demandar poniendo en claro que eso no es una forma de arte, es simplemente robo. El más reciente caso es un acto de justicia. Richard Prince ha formado toda su obra a partir de la apropiación, desde anuncios de Marlboro, portadas de revistas y libros, fotografías pornográficas, carcasas de automóviles que tal cual las lleva al museo... En su última colección de obras alteró las fotografías del fotógrafo francés Patrick Cariou realizadas en Jamaica con rastas en diferentes locaciones de la isla. Prince se apropió de las fotos, las intervino con manchones de pintura, recortes de fotos pornográficas, instrumentos musicales y las vendió en la Galería de Larry Gagosian. 

El monto que lograron estas "obras" fue de 10 millones de dólares. Entonces Cariou, que precisamente estaba preparando una exposición en Nueva York en la galería de Christian Calle con sus fotografías y la presentación del libro, se enteró cuando la galería le canceló su exhibición porque en Gagosian estaban presentando lo mismo. Cariou demandó y hoy en un veredicto histórico el juzgado de Nueva York determinó que las pinturas de Prince violaban las leyes de derechos de autor de 1976, y por lo tanto no podían ser exhibidas y tenían que ser devueltas para destruirlas. El alegato de Prince fue que transformó las fotografías, ya que éstas como tales no eran arte ni obra creativa, que únicamente eran fotografías de género que representaban personas. La defensa aclaró que la fotografía se considera un trabajo creativo desde hace cien años. 

El daño contra la obra de Cariou fue en 41 fotografías de su libro, la imposibilidad de realizar su propia exposición y el atentado contra su obra al verla alterada sin su consentimiento, en muchos de los casos denigrándola porque varias de la obras se burlan de los personajes que él trató de mostrar con dignidad. Esto además es importante porque para la decisión del juzgado influyeron los juicios contra Jeff Koons en los que tuvo que indemnizar por apropiarse del perro de Garfield y de fotografías de otros artistas, en todos los casos ha perdido las demandas y ha pagado daños a los afectados. Estos juicios parece que detonarán una cadena de demandas que detendrán esta forma de robo que llaman arte. La creación es la base del trabajo artístico, el artista aporta con su obra algo que revela y renueva nuestra visión, los paisajes son diferentes a los ojos de Turner o Hiroshige, el mar aunque milenario, cambia a través de la mirada del artista. Tomar la obra de otro y negar la creación está destruyendo el arte y está haciendo del trabajo artístico la repetición monótona de la apatía. 



*Crítica de arte; entre sus líneas de investigación están la pintura europea y el mercado del arte.

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